Cuando era niña y veía una película de pirañas que invadían una ciudad, me aterrorizaba lavarme las manos. Siempre se transmitían por la noche y en algún comercial, después de ir al baño, me dirigía al tanque de la casa para lavarme; me daba pavor meter la jícara para sacar agua, me imaginaba pequeñas hileras […]
