En 1908, cientos de costureras de la fábrica “Textil Cotton” cansadas de la explotación a las que eran sometidas todos los días con largas jornadas laborales, condiciones inseguras e insalubres y con míseros sueldos, salieron a las calles para exigir como trabajadoras un trato digno, a ser reconocidas como sujetas y no esclavas.
Después de las manifestaciones aproximadamente 130 costureras toman las instalaciones de la fábrica como símbolo de reivindicación de sus derechos, la respuesta del sistema patriarcal neoliberal fue incendiar la fábrica junto con ellas adentro, el resultado fue la muerte de 100 de ellas. Tiempo después se tomo como referente esta fecha para CONMEMORAR el Día internacional de La mujer y digo CONMEMORAR porque como la consigna dice: “¡este día no es de fiesta es de lucha y de protesta!
El asesinato de las hermanas Mirabal, el feminicidio múltiple en E.U por los cuales se realizan los 16 días de activismo, por las más de 700 millones de mujeres que fueron casadas cuando eran niñas, los 7 feminicidios reportados diariamente en la República Mexicana, los 123 feminicidios del año pasado en Chiapas que han sido aumentados este año y que a pesar de ello no se ha declarado la Alerta de Violencia de Género, por las mujeres que son vendidas y utilizadas para el trabajo sexual, por los despidos injustificados por la condición de género, por las miles de mujeres que sufrimos y ejercemos violencia hacia nosotras mismas por traer impuesto desde pequeñas el sistema patriarcal, por todas ellas y por nosotras es necesario sembrar más corazones feministas.
Vivimos en una época en la que no basta ser feminista, tenemos también que ser creadorxes de feministas pues los actos de violencia en contra de las mujeres siguen aumentando incitando por medio de la música, televisión y el cine a los hijos sanos del patriarcado a seguir violentando a mujeres y a cometer feminicidios.
Ya lo dijo la Comandanta Ramona “las mujeres que estamos en esta lucha sentimos que nuestra aparición es muy importante, porque llegamos a entender que para cambiar esta mala situación tenemos que participar, no todas en la lucha armada, sino también en diferentes trabajos y en nuestras comunidades”.
«Quiero que todas las mujeres despierten y siembren en su corazón la necesidad de organizarse, porque con los brazos cruzados no se puede construir un México libre y justo que todxs deseamos”. Sembremos la semilla feminista para que cada unx desde nuestra trinchera erradiquemos el sistema patriarcal haciendo acciones para detener y exigir justicia por los feminicidios, los actos de violencia machista, las violaciones y poder liberarnos del sistema patriarcal.