El recuerdo de la infancia ha estado presente en mí, aunque eso no indica que ya esté encaminada a una vejez prematura, o que haya cruzado el espejo y dejado este mundo patriarcal que cada día es más aterrador.
Agradezco haber gozado de la libertad de salir a jugar a la calle con mis primxs, amigxs o vecinxs; regresar sola de la escuela a la casa sin el temor de ser víctima de un asalto, acoso o secuestro.
Además, seguí las recomendaciones de mi mamá y papá:
-Si alguien te llega a buscar a la primaria diciéndote que alguno de nosotros dos se accidentó, o está muerto, o no iremos por ti, no hagas caso; no dejes que te lleven. Si algún día nos llegara ocurrir algo, vendrá tu abuelita o alguna hermana de tu mamá; si alguien te hace algo, dinos para defenderte.
En los últimos años de la década de los 90 Chabelo invadía constantemente los canales de televisión abierta con el comercial diciéndote “Mucho ojo”:
-“Lo que no se puede contar, lo que se tiene que a hacer escondidas, no puede ser bueno, es vergonzoso… dile no a esa persona y aléjate …”.
Las recomendaciones parecían escalofriantes y sin sentido, aunque la paranoia acrecentaba con los “roba chicos”, personas que de la nada te sustraían persuadiéndote con juguete, dulce o dinero.
Este comercial era enfocado sobre todo, para alejarnos de las personas malas y desconocidas que tenían la intención de acercarse a nosotrx. Pero por tristeza a veces el peligro está en casa, es el padre o tío quien corrompe con la ingenuidad de un infante.
Sin embargo, esta añoranza de la niñez surge debido a las últimas noticias que se han presentado en esta República Mexicana, como la niña presuntamente abusada sexualmente por su padre, un hijo sano del patriarcado, y que gracias a la grabación realizada el pasado 3 de abril en un restaurante, se pudo denunciar este delito.
Según datos de la cadena de noticias Primer Impacto informa en su portal que el pederasta tabasqueño ya está tras las rejas, y que “la empleada que grabó el video podría ser acusada de complicidad”.
Datos publicados en el periódico La Jornada -4 de octubre 2006- informó en el 2006 que “en México la existencia de entre 16 mil y 20 mil niños víctimas de explotación sexual y 97 mil incorporados al mercado de trabajo”.
Los niños y las niñas también son víctimas del patriarcado, de los pederastas, de la explotación infantil y la “injusticia” así como la falta de seguridad. Los infantes son el mañana, no lo extingamos.