En el sentido más básico y a la vez profundo el feminismo lo que busca es el reconocimiento en la teoría y la práctica de los derechos de las mujeres, abolir una sociedad que se basa en la dominación de los hombres sobre las mujeres –patriarcado-.
El feminismo como ideología y práctica política tiene muchas corrientes, una de ellas es la “igualitarista” de la que habla Marta Lamas, académica y activista que ha trabajado durante décadas por los derechos de las mujeres.
Está corriente no es nueva y es tal vez de las más aceptadas fuera del feminismo. Es la que insiste en que la diferencia sexual no se debe de convertir en una desigualdad social, que la forma en cómo se rige ahora la sociedad no nos conviene ni a hombres, ni mujeres.
A propósito de un vídeo que se dio a conocer hace unos días, en donde Marta Lamas considera de que el igualitarismo y el feminismo al final del día desde su perspectiva –y la de muchas otras personas- termina siendo lo mismo, algunas personas se manifestaron en contra de la postura de la académica y activista y aseguraron que su discurso va en contra del feminismo.
El tema se agudizó con la campaña que sacó la Universidad Autónoma de México (Unam) en contra de la violencia de género en el que utiliza como imagen principal la espalda desnuda de una mujer. Lo que fue reprobado por muchas personas por considerar que es un contrasentido.
“La publicidad se la ha pasado desnudándonos, recortándonos, usándonos de percheros y adorno, somos aparadores de carne. Gaceta UNAM lo hace ahora porque claro no hay imágenes de estudiantes, profesoras, trabajadoras, deportistas como ejemplo de mujeres cuyos derechos hay que defender” fue un mensaje de Carla Oropeza que se viralizó.
“Y así dice Marta Lamas que ya no hace falta el feminismo” fue otro de los comentarios más comunes.
En lo personal nunca entendí en qué parte Marta Lamas señala que el feminismo ya no es necesario. Aquí les dejo el vídeo en donde define su postura sobre el tema.
Lo cierto es que el discurso de Marta Lamas no es nuevo, ni dentro del feminismo, ni en la propia académica. Ha venido hablando del tema desde hace un rato. Precisamente, cuando dio una conferencia en Tuxtla Gutiérrez dijo: “El feminismo se convirtió en una mala palabra. Los jóvenes necesitan encontrar una nueva palabra para nombrar que todavía hay desigualdad. Podrían llamarse igualitaristas o jóvenes por la equidad, no sé, pero no hay que ponerse la etiqueta de feminista para entender la desigualdad”.
Para muchas se nos es difícil hablar de “igualitarismo” cuando vivimos en una situación muy desigual y por ello es necesario el feminismo porque las que estamos en mayor situación de vulnerabilidad somos las mujeres, aunque la sociedad patriarcal la terminemos padeciendo, de mayor o menor manera, todas y todos. Es cierto que los hombres son los más beneficiados, pero algunos de sus llamados “previlegios” también juegan, a veces, en su contra.
Marta Lamas es una feminista – se sigue reconociendo como tal- que hace un trabajo increíble como académica y activista. Insisto: nadie puede ni debe de entregar las credenciales de quien es y no es feminista. Pienso que es bien importante nombrarnos y reconocernos como tales, ser consciente de que en el mundo no hay mayor desigualdad social que la de género, que atraviesa por todas las desigualdades; pero también creo que cualquier persona, aunque no se llame feminista, que está consciente de que la “diferencia sexual no se debe de traducir en una desigualdad social” y trabaja porque eso sea posible, está –aunque no lo diga, lo reconozca o se lo reconozcan- está siendo feminista.
En nuestra cotidianidad ni siquiera está discusión sobre corrientes ideológicas dentro del feminismo es lo más importante, la lucha ahora va por otro lado.