La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV, 2007), en su artículo 10, define la violencia laboral y docente como aquella que se ejerce por personas con un vínculo laboral, docente o análogo con la víctima, sin importar la relación jerárquica, que daña su autoestima, salud, integridad, libertad y seguridad. Esta violencia impide el desarrollo de la víctima y atenta contra la igualdad.
El ámbito laboral es uno de los espacios donde más se reflejan las desigualdades entre mujeres y hombres. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la prevalencia nacional de violencia en el ámbito laboral es del 26.6%, con Entidades Federativas como Chihuahua, Coahuila, Querétaro, Baja California y Quintana Roo registrando los porcentajes más altos.
La Encuesta Nacional sobre Dinámica de las Relaciones en los Hogares del año 2016 (ENDIREH) indica que el 26.6% de las mujeres que han trabajado alguna vez han sido víctimas de violencia laboral. Además, el 47.9% de las agresiones sufridas por mujeres en el ámbito laboral durante los últimos 12 meses tienen carácter sexual.
Es importante recordar que todas las personas tienen derecho a un ambiente laboral libre de violencia. Por lo tanto, es necesario sensibilizar a la comunidad para contribuir a erradicar este tipo de violencia en todos los ámbitos y lograr una sociedad igualitaria y libre de discriminación.