La vio una vez en el auditorio del Museo de la Ciudad de Tuxtla. No se atrevió a hablarle. Violeta de María Pinto, en ese entonces, con 20 años de edad se limitó a escucharla. Rosario Castellanos nunca supo que ese día, en el que por última vez ofreció una conferencia en Chiapas, la estaba escuchando la persona que se encargaría de festejar sus 90 años de nacimiento, y que ha tomado como un asunto personal difundir la obra de la escritora comiteca.
Este 25 de Mayo se celebraron los 90 años de nacimiento de Rosario Castellanos. El colectivo que lleva su nombre, y que se creó exprofeso para celebrar la fecha, se encargó de que el día no pasara desapercibido.
Violeta de María Pinto preside el Colectivo Rosario Castellanos, que está conformado por diferentes agrupaciones civiles. El trabajo de este colectivo hizo posible que este año un billete de la lotería llevara la imagen de la escritora. Así también promovió que la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach) y la agrupación civil Manaties del Grijalva organizara la conferencia magistral “Rosario Castellanos, feminista” impartida por Marta Lamas.
Su encuentro con Rosario
Violeta tiene 71 años de edad, pero no los aparenta. Desde joven ha tenido problemas para conciliar el sueño, así es como conoció a Rosario Castellanos. Abrió un cajón y ahí estaba Balún Canán, la primera novela de la escritora chiapaneca.
Fue a los 20 años cuando conoció su obra y se apasionó con ella. Dice que es porque se identifica con la autora. “A mí Rosario me mueve mucho”.
La obra de Rosario Castellanos ha trascendido a nivel nacional e internacional, sin embargo en Chiapas no es tan conocida como debiera. Violeta considera que esto se debe a que su obra es muy dura y directa. “A veces lo que quieren escuchar de una poesía es que todo es lindo y Rosario lo que hace es ponernos a pensar, a cuestionarnos”.
La obra de Castellanos ha sido invisibilizada por un acto de misoginia de la clase política e intelectual. Ayer las personas que fueron a dejarle flores no llegaron a los 30, la mayoría mujeres.
“Hay eso que llaman neomachismo. Ese machismo que ni siquiera reconocen los hombres. Tienen un discurso a favor de los derechos de las mujeres, pero sólo de dientes para fuera, pero no son congruentes en sus actos” dice Violeta.
La obra de Rosario le cambio la vida a Violeta. La convirtió en feminista y logró liberarse de muchas construcciones patriarcales que le inculcaron durante la primera etapa de su vida.
No lo dice, pero Violeta quiere regresarle el favor a Rosario, por eso se preocupó tanto porque su cumpleaños numero 90 no pasara desapercibido. Quiere que más personas la conozcan, se encuentren en su obra y logren, como ella, liberarse.