por: kuuntik | Oct 26, 2017
El Centro de Derechos Humanos Ku’untik, exige al alcalde de la capital de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez, cese de denostar públicamente a la Periodista Sandra de Los Santos.
Recientemente han sido publicadas en medios y redes sociales cartas en dónde descalifica el trabajo periodístico de Sandra de Los Santos, señalando de que miente en sus publicaciones sin exhibir las pruebas que demuestren su dicho, y por el contrario Sandra de Los Santos sí refiere las fuentes de donde obtuvo sus datos. En cualquier contexto, pero más en México, que según la organización Reporteros Sin Fronteras es el tercer más peligroso del mundo para ejercer el periodismo, comunicados como los de Fernando Castellanos ponen en situación de vulnerabilidad a la Periodista y en un momento dado también a sus pares.
Le recordamos al alcalde Castellanos que él, como autoridad, tiene la obligación de condenar enérgicamente las agresiones contra periodistas y no contribuir a un ambiente adverso a su labor, y debe reconocer de manera constante, clara, pública y firme la legitimidad y el valor de la labor periodística, aun cuando la información difundida pueda resultar crítica, inconveniente e inoportuna para los intereses de su gobierno.
Por lo anterior exhortamos a Fernando Castellanos a cambiar su discurso intimidatorio y adoptar un discurso público que contribuya a prevenir la violencia contra periodistas, y que no exponerlas a un mayor riesgo.
Le recordamos que, como Agente del Estado mexicano, según la jurisprudencia internacional en materia de derechos humanos, está obligado a brindar la “seguridad de las mujeres que ejercen el periodismo, que tomen en cuenta los múltiples y específicos riesgos que enfrentan. Esto implica comprender cómo operan las desigualdades de género y las prácticas sexistas en el fenómeno de la violencia contra periodistas, y con ello favorecer la definición de medidas de prevención, protección y procuración de justicia adecuadas. La violencia contra las mujeres periodistas puede manifestarse de distintas formas, desde el asesinato, la violencia sexual (incluido el acoso sexual), la intimidación, el abuso de poder y las amenazas basadas en el género.”
Así mismo, solicitamos a la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Chiapas (CEDH) que bajo el tenor anterior se inicie expediente de queja y emita solicitud de medidas cautelares a favor de Sandra de los Santos Chandomí, en el sentido de pedir al presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez, Fernando Castellanos Cal y Mayor se abstenga de continuar publicando textos intimidatorios que lejos de ayudar a disminuir el riesgo en que trabajan y viven las mujeres periodistas, contribuye a su exacerbación. En todo caso, el ejercicio de su derecho de réplica debería ir debidamente fundado y motivado, de manera respetuosa y con los elementos de prueba que sustenten su dicho.