Por: Yudith Gutiérrez
Fotos: Cortesía
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Existen personas que nacen con el don de ayudar a los demás y Laura Alejandra Sánchez Castillo es una de ellas. Actualmente forma parte del grupo de guías para atletas ciegxs y débiles visuales de la Selección Chiapas, que participó en la Paralimpiada Nacional 2015 en el estado de Querétaro.
Es guía de otra destacada atleta paralímpica como es el caso de Valeria Espinosa Aguilar, quien hizo lo propio al ganar medalla de plata en los 100 metros planos categoría sub-19, en la máxima justa deportiva nacional y donde Laura Alejandra fue parte importante para que obtuviera ese triunfo.
Aunque la labor de lxs guías parezca una historia de triunfo oculta, lo que hace felices a personas como Laura Alejandra, es precisamente que lxs atletas triunfen y obtengan medallas en las competencias.
Se vuelven una sola persona al entrar a la pista, sincronización, fuerza, coraje, rapidez. No es nada sencillo estar al pendiente en todo momento y acoplarse al ritmo de competencia de su atleta. En el caso de Laura, es dejar todo en la pista para apoyar a Valeria.
“He entrenado con ellxs, me enseñaron lo que es ser una guía y me gustó, me aprendí el reglamento. Mis marcas son mejores que ellxs y no iba a tener problema para ayudarlxs en alguna prueba; aparte el entrenador Víctor Manuel Sánchez Aguilar, me ha dicho que soy muy paciente”.
Y ello se nota al momento de verla convivir con sus demás compañerxs guías y atletas. La relación se ha hecho de confianza y de amigxs. Aunque la empatía existe más con Valeria, de quien además de ser su guía es una de sus mejores amigas y también la acompaña a sus partidos de golbol donde Valeria obtuvo medalla de bronce con la selección estatal y a reuniones personales.
Esta forma de ayudar única, que se combina a la vez con ese deseo de practicar el atletismo, han hecho de Laura Alejandra, una persona disciplinada y con mucho carácter a pesar de su corta edad; lo que le ha valido el recibir varios reconocimientos dentro de la institución en la que estudia, gracias a su labor humanista y además de ser una destacada alumna.
“Siempre he admirado a las personas que tienen una discapacidad y más a lxs chicxs con quienes entreno, con ellxs he encontrado una de las satisfacciones más bonitas de mi vida”.
Deportista desde muy pequeña, inició con el atletismo de manera fugaz por sentirse atraída con el basquetbol, deporte que practican sus hermanas y sus papás, pero su talento la regresó nuevamente a lo que es su pasión.
“Desde chica en la escuela participé en eventos deportivos, concursos de basquetbol y atletismo, participaba en todos porque soy hiperactiva y desde los tres años empecé a competir en carreras y siempre ganaba, era como ganar por distancia largas pero yo lo que quería en ese momento era ser basquetbolista pero por algunas diferencias en ese grupo retomé mi pasión, el atletismo”.
Recordó que no fue fácil, al sufrir una lesión en un entrenamiento para competir de manera personal, lo que le impidió viajar con la selección a su primera paralimpiada. A partir de ahí, ha preferido darle prioridad a la selección estatal.
Laura Alejandra trae una herencia familiar ligada al deporte, su abuela materna practica cachibol y de igual forma ha participado en competencias de nivel nacional.
“Lo que siempre agrego es que admiro demasiado a lxs chicxs, son unxs luchadores, trabajan por lo que quieren, me agrada mucho ser parte de ellxs, no se dejan hacer menos, ayudarlxs a cumplir sus metas y sus sueños y para donde quieran ir voy con ellos si ellos quieren, es para mí una de las mayores satisfacciones que tengo como deportista”.
El atletismo es uno de los deportes más emblemáticos y en la paralimpiada, es el deporte que más pruebas y competidores tiene, porque los competidores están divididos según sus discapacidades.
«El ser una guía, me parece muy bien que se reconozca, pero acá el verdadero reconocimiento es el esfuerzo que se realiza al competir junto al corredor», puntualizó Laura Alejandra Sánchez Castillo.